Todos somos ignorantes. Lo que sucede es que no ignoramos las mismas cosas. A. Einstein

17 enero 2010

Ensayo imaginacion sociologica

En el siglo XXI son variados los problemas sociales que interfieren en la vida personal de los individuos que la conforman. No obstante, algunos de los problemas tildados como propios son también consecuencia de los hechos contemporáneos externos a nuestro ámbito familiar e inmediato. Es de allí de donde surge la necesidad de relacionar el contexto social con la vida propia, una capacidad mental definida como imaginación sociológica.
Esta capacidad poco desarrollada en nuestra sociedad nos ayuda a distinguir los nexos que tenemos entre nosotros y la sociedad, por ello es el objetivo de este ensayo apartarse de los temas tradicionales relacionados con este tema, como el desempleo o el alcohol, para analizar los problemas de salud relacionados con la imagen personal, más específicamente del tipo alimenticios: anorexia y bulimia. Por lo cual buscaremos responder a las siguientes preguntas:

¿Cómo influye la sociedad en nuestra imagen corporal? ¿Son inquietudes o problemas este tipo de enfermedades?

Para comenzar, describiremos en breves párrafos a cada enfermedad:

Anorexia: es un trastorno alimentario que implica limitar la cantidad de alimento que una persona come, ocasionando inanición y una incapacidad para permanecer en un peso corporal mínimo, considerado normal para su edad y estatura.
Las personas con este trastorno pueden tener un gran miedo a aumentar de peso, incluso cuando están con peso insuficiente. El hecho de no consumir suficiente alimento o hacer demasiado ejercicio ocasiona pérdida de peso severa.

Bulimia: es un trastorno alimentario en el cual las personas que la padecen son incapaces de dominar los impulsos que les llevan a comer, pero el sentimiento de culpa y vergüenza tras ingerir muchos alimentos les lleva a una purga (vómitos autoinducidos o empleo de laxantes o diuréticos o ambos), regímenes rigurosos o ejercicio excesivo para contrarrestar los efectos de las abundantes comidas.
Ambas enfermedades pueden comenzar como una adicción a la dieta y se dan principalmente entre mujeres entre 11 y 18 años, pero pueden aparecer también en mujeres de hasta 25 años. Actualmente, también suelen verse varones con este tipo de padecimientos y mujeres con algunas características de la enfermedad que superan los 30 años.
Factores sociales
Ir a una casa de indumentaria y no encontrar el talle necesario, ver múltiples publicidades con hermosas modelos pero de proporciones irreales, empezar un deporte y luego abandonarlo por no cumplir con las medidas corporales para realizarlo, son estas y otras situaciones e principal desencadenante de estos trastornos alimenticios.
Según estudios, la persona se siente constantemente presionada y en continua competencia con la sociedad derivando en un estado depresivo con baja autoestima, cuya solución es imponerse rigurosas dietas y rutinas de gimnasio excesivas.
Parece absurdo y hasta obvio, pero aún sin darnos cuenta son variadas las situaciones en las cuales los medios masivos de comunicación y la sociedad nos imponen un estereotipo, un modelo o patrón según el cual debemos adaptarnos para poder “encajar” en la sociedad.
El cine, la fotografía, y los reportajes sobre métodos de adelgazamiento son algunas de las formas que contribuyen a determinar el estado de opinión y evaluación corporal que tenemos de nosotros mismos, Y una forma de comprobarlo es prestando atención en las reuniones sociales a las conversaciones que se entablan, donde nunca faltan los comentarios, (de mujeres principalmente) sobre las imperfecciones de sus cuerpos, distintos tipos de dietas, los talles de la ropa, una innovadora cirugía plástica o una nueva rutina de gimnasio extenuante. Demostrando así la importancia que socialmente se le otorga a la imagen corporal.
El costo de este estilo de vida, es en muchos casos irreversible y requiere importante atención médica y control familiar para volver a tener una vida normal. Las consecuencias pueden ser tanto psicológicas como físicas, y entre estas últimas encontramos las siguientes:
• Aparición de vello corporal fino similar al de los bebés (lanugo)
• Edema o distensión
• Desequilibrio de electrolitos (como la insuficiencia de potasio)
• Disminución en el conteo de glóbulos blancos que lleva al aumento de la susceptibilidad a las infecciones
• Arritmias cardíacas
• Osteoporosis
• Deshidratación severa que posiblemente lleva a shock
• Desnutrición grave
• Convulsiones debido a la pérdida de líquido por la diarrea o el vómito excesivos
• Problemas de la glándula tiroides, que puede llevar a que se presente intolerancia al frío y estreñimiento
• Erosión dental y caries
Volviendo a una de las preguntas planteadas al principio, la anorexia y la bulimia no son inquietudes sino problemas, porque ambas enfermedades afectan a un gran numero de personas en el mundo, y lo lamentable de esta situación es que los valores crecen cada día junto al numero de muertes por causa de estas enfermedades. Los siguientes datos lo avalan:
• el índice de mortalidad de la bulimia y la anorexia fluctúa entre el 5 y el 15 por ciento de la población afectada por estos dos males. El 90 por ciento de quienes las padecen son mujeres. Sin embargo, la aparición de sus síntomas está creciendo entre los varones. En los últimos años del 5 al 10% de los casos son hombres, según la Organización Mundial de la Salud.
• el año pasado los consumidores argentinos gastaron 20 millones de dólares en productos para perder peso. En los sectores comerciales del país proliferan los gimnasios y los centros para adelgazar.
• entre un 5-10% de las anoréxicas fallecen a consecuencia de la enfermedad o por suicidio, alarmantemente cada vez más. La incidencia por muerte de la anorexia nerviosa ha crecido del 5 al 7% en los últimos diez años, según cifras de la OMS (Organización Mundial de la Salud).

Llegando a una conclusión, tal vez la imaginación sociológica sea esa herramienta fundamental que todos necesitamos para poder determinar hasta que punto la sociedad va a influir en nosotros, y así lograr evitar el manejo que miles de empresas buscan para incrementar sus ganancias en un mundo capitalista donde el tener esta por encima del ser. La solución está en cada uno y depende de si mismo poder encontrarla.

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